Enfrentar las presas no solo es cuestión de paciencia, sino también de estrategias inteligentes para proteger su bienestar mental
La flota vehicular en Costa Rica se triplicó entre el 2000 y este año, pasando de 600 mil vehículos a 1,8 millones, según los datos del marchamo del Instituto Nacional de Seguros (INS).
Durante ese mismo periodo, la construcción de infraestructura nueva y la mejora del sistema de transporte público no han contado con avances significativos, y por ello, hoy los ticos pierden hasta 7 minutos, en el peor de los casos, para recorrer apenas 100 metros durante la hora pico.
Las presas no van a desaparecer de la noche a la mañana, y por eso, es mejor que usted se arme de paciencia —y hasta practique un poco de yoga en el carro— para mantener su paz mental.
Elvis Solano, psicólogo clínico de la Escuela de Psicología de la Universidad Nacional (UNA) le brinda 5 recomendaciones prácticas para mantenerse tranquilo en medio del caos vehicular:
1. Acepte la realidad
En un país donde las presas son parte del paisaje diario, pelear contra ellas solo aumenta el estrés. “Uno puede decir que se tomen rutas alternas o que salga de su casa más temprano, pero tarde o temprano va a encontrarse con un embotellamiento, y ante eso, debe haber una aceptación de esa realidad, que no genere mayor presión que pueda conducir a una elevación en los niveles de estrés”, explica Elvis Solano, psicólogo clínico de la Escuela de Psicología de la Universidad Nacional (UNA). Reconocer que las presas son inevitables ayuda a gestionar mejor las emociones.
2. Comparta el viaje (Carpooling)
Convertir su traslado diario en una actividad social puede cambiar completamente la experiencia. Compartir el carro con compañeros de trabajo o vecinos que tienen rutas similares no solo reduce el número de vehículos en carretera, sino que también crea espacios para la conversación y la compañía.
3. Maneje su respiración
Un ejercicio sencillo y efectivo: cierre los ojos (cuando el carro esté detenido, claro está), inhale profundamente, exhale lento y deje que el aire fluya por sus pulmones. Conectar con su respiración le permitirá relajarse y mantenerse en calma, incluso en medio del tráfico más denso.
4. Música o podcasts para su bienestar
La música tiene un poder transformador. Escuchar canciones que disfrute o un buen podcast de misterio, historia o cualquier otro tema de interés puede hacer que el tiempo en la presa pase mucho más rápido y sea, incluso, placentero.
5. Realice actividades que le generen bienestar
Después de una jornada extensa en la carretera y el trabajo, regálese un espacio para usted. Salir a caminar, sacar a pasear a su mascota o practicar alguna actividad que le dé satisfacción es clave para liberar tensiones acumuladas.
Enfrentar las presas no solo es cuestión de paciencia, sino también de estrategias inteligentes para proteger su bienestar mental. Al final del día, su paz vale más que cualquier minuto atrapado entre un carro


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